Tenemos la tendencia de considerar al agua como un recurso natural renovable e inagotable. En nuestro día a día no siempre somos conscientes de que en realidad, el agua es un bien escaso y limitado.
Además, resulta ser un elemento esencial para la supervivencia del ser humano y el mantenimiento de la vida en nuestro planeta. Es por ese motivo que debemos considerar como una responsabilidad de todos el evitar su contaminación.
La recuperación del agua es nuestro trabajo
Por fortuna, el agua es un recurso que puede ser recuperado para el consumo tanto humano como del resto de seres vivos que habitan la Tierra.
Para lograr eliminar todos aquellos contaminantes que la ensucian y la hacen inservible, ya sean por causa de la actividad doméstica o debido a los procesos de producción industrial, debemos llevar a cabo una serie de tratamientos de dichas aguas residuales para conseguir su purificación.
Independientemente de que estos tratamientos sean de carácter físico, químico o biológico, podemos en su conjunto clasificarlos y subdividirlos como tratamientos primarios, secundarios y terciarios. Veamos a continuación en qué consiste cada uno de ellos.
Los tratamientos de tipo primario
En el proceso de depuración de efluentes y aguas residuales, las primeras acciones van encaminadas a retirar y eliminar aquellos componentes contaminantes de mayor tamaño, ya se hallen estos disueltos en el agua o simplemente en suspensión. La técnica empleada para su separación es mediante el asentamiento en reposo del líquido elemento, a fin de fijar o depositar los desechos del material flotantes y los sólidos pesados presentes
¿Cómo continúa el proceso?
La solución resultante después de ser sometido a este primer tratamiento ya suele contener en peso, menos del 50% de la mezcla original que llegó a la planta de tratamiento y aproximadamente dos terceras partes del DBO (Déficit Biológico de Óxigeno) en forma de sustancia coloidal y de varios compuestos orgánicos aún disueltos.
En los casos en que la masa de agua resultante pueda volver a diluir con cierta rapidez estos desechos líquidos restantes, las aguas residuales tratadas primariamente suelen ser descargadas a nuevos tanques de tratamiento, para que la descomposición biológica natural termine por completar la oxidación los desechos resultantes de este tratamiento inicial.
Usualmente, el objetivo que tiene este tratamiento primario puede variar dependiendo si lo que precisamos en regular el pH o la temperatura, eliminar la coloración de teñido o el olor, o simplemente reducir los sólidos en suspensión, eliminar la materia flotante y retirar los elementos que pudieran resultar dañinos para las instalaciones de tratamientos más finas a posteriori.
Los principales procesos asociados a este tipo de tratamiento
- Homogeneización
- Neutralización
- Ajustes de pH
- Coagulación
- Floculación
- Flotación
- Filtrado
- Desarenado
- Desaceitado
- Cribado
Hablemos de los tratamientos secundarios
El tratamiento secundario tiene por objeto reducir los niveles de contaminación química y biológica (DQO y DBO, respectivamente) a través de procesos químicos y/o biológicos.
Se espera que una planta de tratamiento de aguas residuales que proporcione tanto el tratamiento primario como el secundario elimine al finalizar ambos procesos, al menos el 85 por ciento de los niveles de contaminación química y biológica, además de los sólidos en suspensión que aún estuviesen presentes en las aguas residuales.
Dada la gran variedad de descargas contaminantes aún disueltas, la eliminación de estas sustancias se llevan a cabo en plantas de tratamientos de aguas residuales y de depuración de aguas, conocidas como PTAR las primeras y EDAR las segundas.
Ambas son diseñadas en función de las características de los efluentes a tratar de manera específica y de las necesidades básicas de reducción de contaminantes que se precisen, según el uso que se le vaya a dar a ese agua en concreto.
Es interesante destacar que la eliminación biológica de nutrientes es considerada por algunos ingenieros sanitarios como tratamiento secundario, mientras que otros lo clasifican como tratamiento terciario. La diferenciación también puede variar dependiendo la legislación en materia sanitaria y medioambiental entre un país a otro.
Principales procesos asociados a la definición de tratamiento secundario
Entre los calificados dentro de esta categoría están las técnicas la activación de lodos (ya sean por métodos convencionales, de oxígeno puro, de aireación extendida, de lecho móvil, de lecho fijo o de lecho fluidizado), los biodiscos, los filtros biológicos, las lagunas aerobias y anaerobias, la digestión anaerobia, la sedimentación, los procesos anóxicos y los humedales artificiales.
Sobre los tratamientos terciarios
El principal propósito del tratamiento terciario, también denominado como tratamientos avanzados, es adicionar una etapa extra de tratamiento que sirva para incrementar todo lo posible la calidad final del agua tratada antes de ser descargada en el medio receptor o ser derivada como efluente reutilizable dentro de las instalaciones de producción industrial.
El tratamiento terciario puede incluir la eliminación biológica de nutrientes (como complemento a los tratamientos secundarios que se hubieren aplicado con anterioridad), la desinfección y la eliminación de microcontaminantes, así como la disipación de los contaminantes farmacéuticos que puedan permanecer con carácter persistentes en el medio líquido.
Podemos concretar pues que, el objetivo de los tratamientos terciarios tienen como misión el lograr la reducción de los niveles de patógenos presentes en el agua, desinfectando el efluente y complementando la remoción de materia contaminante del agua.
Los procesos más relevantes incluidos dentro de la categoría de tratamientos terciarios son aquellos que emplean membranas de filtrado, ya sean microfiltradoras, utrafiltradoras, de ósmosis inversa o de electrodiálisis.
También se engloban en esta clasificación las instalaciones que utilizan tecnologías de intercambio iónico, de absorción, de procesos de reducción – oxidación (REDOX), los métodos de precipitado, la ozonización y la aplicación de luz ultravioleta.
En CP Ibérica somos especialistas en el diseño de plantas de tratamientos de aguas residuales. Nos enfocamos en ofrecerle las mejores soluciones de tratamientos y eliminación de sustancias contaminantes de los efluentes resultantes de procesos de producción industriales.
Nos adaptamos a las necesidades de cada uno de nuestros clientes, desarrollando proyectos personalizados y acordes a las exigencias y cualidades que su empresa precise.
Deja una respuesta